El peso argentino se apreció, rompiendo una caída de cinco días mientras las intervenciones del mercado por parte de los gobiernos local y estadounidense continuaban. El presidente Javier Milei y el secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, están trabajando para prevenir una crisis monetaria a medida que se acerca la crucial elección de medio término para el líder libertario argentino. El martes, el peso se acercó a los límites de su banda de negociación, lo que llevó al Banco Central de Argentina a intervenir y apoyar la moneda por primera vez en casi un mes. El Tesoro de EE. UU. también ha intervenido, según informaron personas familiarizadas con la situación. La moneda se apreció hasta un 0.6 por ciento al inicio de las operaciones del miércoles, moderando posteriormente sus ganancias al 0.2 por ciento, cotizando a aproximadamente 1,487 pesos por dólar. El límite inferior del rango de negociación, que se amplía diariamente, está actualmente posicionado en 1,491.6. Los bonos en dólares de Argentina experimentaron una caída en toda la curva, con notas que vencen en 2035 disminuyendo un centavo para cotizar a 55 centavos por dólar, según datos de precios indicativos recopilados por Bloomberg.
Bessent confirmó la firma de una línea de intercambio de 20 mil millones de dólares con Argentina un día antes, describiéndola como “un puente hacia un mejor futuro económico para Argentina, no un rescate.” Sin embargo, sus intentos de asegurar financiamiento equivalente del sector privado para la nación sudamericana propensa a crisis aún no se han materializado, ya que los bancos exigen claridad en cuanto a los términos, la estructura y las garantías. Drenar la línea de swap de 20 mil millones de dólares para defender la moneda de Argentina “podría inclinar rápidamente la balanza de manera desfavorable,” señaló Juan Manuel Pazos en un informe esta semana. “Si el objetivo es mantener el régimen cambiario por un período prolongado, es probable que se requiera un segundo rescate de US0 mil millones de los bancos.”
El jefe de economía de Milei, Luis Caputo, reafirmó en una publicación que la política cambiaria permanecería sin cambios. Los inversores están percibiendo cada vez más las bandas de negociación del peso, que se instituyeron en abril como parte del acuerdo de Argentina con el Fondo Monetario Internacional, como un mecanismo que apoya una moneda sobrevaluada. Los participantes del mercado están monitoreando de cerca los posibles desarrollos dentro del Gabinete de Milei. El Ministro de Relaciones Exteriores argentino, Gerardo Werthein, una figura clave en las negociaciones con Estados Unidos, presentó su renuncia el martes por la noche.
La tensión política está aumentando en los Estados Unidos. En reacción a la crítica de la senadora demócrata Elizabeth Warren sobre los gastos de EE. UU. en medio del cierre del gobierno, Bessent caracterizó la iniciativa de la administración Trump para apoyar a Argentina como “crítica para la misión”. La asignación de recursos del Tesoro “proporciona apoyo específico a un aliado clave que ha seguido políticas fiscalmente responsables y de libertad económica,” declaró en una carta a Warren fechada el martes. Los mercados argentinos están mostrando signos de fatiga en respuesta al continuo flujo de comunicaciones en redes sociales por parte de funcionarios tanto estadounidenses como argentinos, como señaló Joaquín Bagues. “En este momento, es por visión,” afirmó. “El mercado se comprometerá cuando tenga mayor certeza.”
